La despedida del verano ya está a la orden del día, porque el otoño ya empezó a anunciarse con temperaturas más bajas de lo normal y por esa razón es que justamente tenemos que ir preparando todo, pero no sin antes festejar las fiestas patrias así como se debe, porque eso llegará primero, que el otoño, el cual entra el 23 de septiembre, pero cuando llegue, nosotros ya estaremos bien comidos y servidos de sopas, guisados y hasta postres.

Seguro ya todos a estas alturas están pensando en la sopa y el guisado, pero si algo tampoco debe faltar en las fiestas patrias del 15 y 16 de septiembre eso definitivamente es el postre. Y es que muchos creen que tiene que ser algo elaboradísimo, como un pastel de 3 leches o una gelatina tricolor, pero la verdad es que no, porque a veces no tenemos ni tiempo, ni presupuesto.

Por eso hoy queremos compartir contigo una receta para que elabores un auténtico postre mexicano, como lo son las galletas de nata, un postre sencillo, pero con mucho sabor que puedes armar en poco tiempo, porque definitivamente es una gran opción, porque además combinan con todo, como la canela, el café de olla, el arroz con leche, etc. 

Esta receta te rendirá para hacer aproximadamente unas 12 o 14 galletitas (todo depende del diámetro). Lo más tardado es dejar que la masa repose, que para esta receta tarda 1 hora y ya después,todo el proceso es super fluido. No te llevarás más de 30 o 35 minutos, ya verás. Así que fuera dudas y ¡manos a la obra!

La palabra galleta viene de la palabra francesa galette. En Francia la galette es un pastel redondo o fino o un crepe hecho con trigo sarraceno. Galette proviene de galet, que significa literalmente "guijarro" y es el diminutivo de gal (piedra). Gal es una palabra que proviene de las lenguas indoeuropeas, concretamente de la voz cal, que significaba "piedra". En francés, aquel pastel recibió el nombre de galette (diminutivo de galet) por su forma redonda.

Las primeras galletas de la historia, fueron duras, secas y sin azúcar. A menudo eran cocidas después del pan, en el horno de una panadería, cuando estaba ya enfriándose para aprovechar el calor.. Eran una forma barata de sustento para los pobres. En el siglo VII d.C. los cocineros del imperio persa ya habían aprendido de sus antepasados las técnicas de calentamiento y cómo enriquecer las mezclas a base de pan con huevos, mantequilla y crema, y a endulzarlas con frutas y miel.

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