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Te contamos qué deberías comer y beber cuando te pasas con el alcohol, qué alimentos deberías evitar y te damos alguna recetas para combatir la resaca efectivas (y ricas).

Lo primero que deberías recordar en un día de resaca es que “las calorías derivadas del consumo de alcohol no aportan valor nutricional y son muy difíciles de quemar, se asimilan fácilmente, pasando directamente a los depósitos de grasa”, dicen los expertos en nutrición de KilosOut. Es decir, que no sólo te encuentras fatal sino que además engordas. “Desde KilsoOut nos sumamos a la iniciativa de la OMS para reducir el uso nocivo del alcohol, ya que afecta al sistema nervioso y siempre implica riesgos varios”, recalcan.

Pero si vas a beber alcohol por el motivo que sea, “hazlo con moderación y preferiblemente mientras comes algo, pues con el estomago vacío, el organismo absorbe el alcohol con más rapidez”, dicen desde KilosOut. “Y un truco, beber mucha agua para disminuir la deshidratación que siempre produce una copa de más”.

¿Sabes que una caña contiene unas 100 calorías? ¿Y que necesitas 35 minutos de caminata para quemarla? KilosOut te recomienda mejor elegir té frío, agua con gas con mucho hielo y limón, refrescos sin azúcar y, si no te resistes al alcohol, mejor un tinto de verano con mucha casera y un poquito de vino tinto. “El alcohol es deshidratante por naturaleza, así que para empezar hay que beber mucha agua para recuperar la perdida de líquidos provocada por ese alcohol ingerido”, añaden.

Un consejo de KilosOut para combatir los efectos secundarios de su consumo, es beber infusiones. “Si contienen Ginko Biloba, nos ayudará a mejorar la irrigación sanguínea de nuestro organismo tras la ingesta de alcohol. “También los caldos aportan mucha hidratación y perfectos los que contienen verduras (zanahorias, cebolla, apio), porque nos ayudan a reponernos de sales y vitaminas”.

Respecto a la comida, desde KilosOut recalcan que hay que comer lo más saludable posible para reparar el daño causado por el alcohol, así que, por mucho que te apetezcan, aléjate de las fast food y los bollos. “Toma verduras como el tomate, que nos ayuda a eliminar las toxinas o las espinacas, que cuidan y fortalecen nuestro hígado y son ricas en vitamina C y ácido fólico”.

“Como cada día, deberías cuidar que la fruta esté presente en tus ingestas, especialmente el plátano, que es una fuente natural de potasio cuyos niveles disminuyen cuando bebemos y nuestro cuerpo se deshidrata”, apuntan los expertos de KilosOut.

“La falta de potasio nos provoca en parte ese cansancio del día siguiente”. También recomiendan tomar frutas como el mango, sandía o cualquiera que tenga una alta proporción de agua y vitaminas reconstituyentes. Según estos expertos, hay que ayudar al hígado a metabolizar el alcohol y su alto contenido en agua nos rehidrata rápidamente.

“También es recomendable ingerir proteínas de alta calidad como los huevos o lácteos, que contienen cisteína, que ayuda a digerir el acetaldehído, un compuesto tóxico relacionado con la ingesta excesiva de alcohol”. “O pescados azules como el atún o el salmón ricos en vitamina B, fundamental para recuperarte”.

Como explican desde KilosOut, uno de los órganos que más se daña con el exceso de alcohol es el hígado, porque es el principal responsable de transformarlo para que lo eliminemos correctamente.

“En esto nos ayuda el tomate, ya que tiene vitamina C y componentes como el licopeno, polifeoles, zeaxantina, quercetina… todos importantes para la protección de nuestro hígado, aunque el principal es el licopeno”, dicen desde KilosOut. “Por ello es famoso el zumo de tomate, aunque los licopenos se vuelven más biodisponibles o más fácilmente absorbibles cuando se cocinan, ya que cambian su configuración y se absorben mejor, por lo que mejor que un zumo de tomate sería una sopa de tomate, pisto o salsa donde el componente principal sea el tomate cocinado a fuego lento”.

¿Por qué tenemos tanta sed cuando nos pasamos con el alcohol? “Deshidratación… así de fácil”, subrayan los expertos de KilosOut. “El consumo de alcohol inhibe una hormona llamada vasopresina que controla la reabsorción de agua en nuestros riñones, razón por la que aumenta la frecuencia para ir al servicio. Como consecuencia de esta excesiva eliminación de agua se produce la deshidratación, aumentándose las ganas de beber”.

“Una diuresis excesiva puedo provocar alteraciones en el nivel de nuestros electrolitos (potasio, sodio…), lo que se puede manifestar con síntomas de fatiga, cansancio, debilidad e incluso calambres musculares”. “Por estas dos razones, la sensación de sed y las ganas frecuentes de ir al baño afectan y alteran el sueño, impidiendo que sea de calidad”, aclaran desde KilosOut.

Como ya hemos comentado antes, en los días de resaca siempre nos apetece comida grasienta y dulce. ¿Por qué? “Nos apetece pasta y dulces porque la deshidratación que nos ha provocado el alcohol también nos produce una hipoglucemia y pérdida de minerales”, dicen desde KilosOut. Y como ya sabes, este tipo de comidas es el menos recomendable. “También debemos evitar el café , ya que el alcohol deprime el sistema nervioso central, así que si lo estimulas con café, estás retrasando la resaca porque la enmascaras y además es un estimulante gástrico que puede causar irritación en tu estomago, ya maltratado por el alcohol. Mejor toma un vaso de leche para rehidratarte y beneficiarte de su calcio”, apuntan.

¿Otro mito? Lo de que la resaca se pasa tomándote otra cañita… “Y no tomes picantes ni comida grasienta, ya que el alcohol se procesa por medio de las mismas vías metabólicas que la grasa y el cuerpo ya tiene bastante metabolizando el alcohol ingerido. Un consomé desgrasado y calentito te ayudará a reponer sales minerales”, apuntan los expertos de KilosOut.

Aquí tienes las cinco recetas ricas, bajas en grasa, con proteínas de alto valor biológico y lácteos que nos recomiendan desde KilosOut y que puedes ver en su web:

Cortar cebolla y el relleno de los pimientos en daditos pequeños, añadir sal al gusto y pochar en una sartén antiadherente o a la piedra a fuego lento. Retirar del fuego cuando este blandito.

En la misma sartén o en una más grande, añadir la carne picada, sal y pimienta.

Cuando veas que la carne empieza a cocinarse, añades la salsa de tomate y remueves hasta que la preparación termine de cocinarse.

Al mismo tiempo, cocinas un poco los pimientos para que no se queden duros. Nos gusta hacerlo en un estuche de vapor al micro 6-8 minutos; también puedes asarlos un poco al horno teniendo cuidado que no se rompan. Rellenar los pimientos con la preparación anterior y poner en una bandeja que permita meterla en el horno.

Picamos la cebolla, el pimiento, el ajo y la rama de apio en daditos pequeños. A continuación pondremos una sartén a fuego medio con un poco de caldo de verduras y echaremos todo lo anterior, bajaremos el fuego al mínimo para que se vaya pochando todo lentamente.

Cuando la cebolla este tierna agregamos un pizca de comino, los clavos, el tomillo, un pizca de pimentón y los tomates previamente limpios y picados en daditos. Todo esto lo moveremos hasta que se reduzca el agua proporcionada por el tomate.

Lavamos bien los calabacines y con una mandolina o espiralizador, los cortamos en forma de espaguetis o tallarines. También se pueden hacer con espaguetis de calabaza. 4) Una vez reducida la preparación del punto 2, rectificaremos de sal y pimienta, e incorporaremos los espaguetis de calabacín. Taparemos la sartén y permanecerá así durante 4 min y apagaremos el fuego.

Rallar o picar media coliflor. Puedes ayudarte por un robot de cocina que deje la coliflor picadita y uniforme. Colocar en un recipiente, añadir una pizca de sal y cocer 6-8min en el microondas. Dejar templar una vez terminada la cocción.

Añadir el huevo batido y mezclar bien haciendo una masa. Extender la masa en papel de horno y ponerla sobre la rejilla (importante). Meter al horno precalentado a 180º (modo arriba y abajo) en la parte media del horno. Dejar unos 15-20min hasta que veas que la masa se va tostando. Puedes darle la vuelta para que se haga bien.

Una vez dorada la masa sacarla y añadirle una capa de la salsa de tomate, un poco de orégano y albahaca. Nosotras hemos añadido queso bajo en calorías, pollo marinado con especies y rúcula. Pero admite todo lo que más te guste.

Volver meter en el horno, esta vez en modo gratinado y dejar hasta que el queso se derrita y se dore. ¿Sabes que puedes cambiar la base por calabaza, calabacín y kale?

Poner las pechugas de pollo en una tabla de cocina y cubrir con papel film. Golpear con un mazo de carne para que estén finitas y blanditas. Sal-pimentar por los dos lados.

Cubrir cada pechuga con 1 loncha de queso bajo en grasa. Cortar el tomate en daditos muy pequeño (se puede pelar si quieres para una consistencia más fina). Colocar en cada pechuga el tomate y 1 o 2 hojas de Albahaca según tamaño por encima. Precalentar el horno a 180º.

Hacer un rollito con cada pechuga procurando que no se salgan los trocitos de tomate. Si fuese necesario cerrar con un palillo a modo de alfiler. Poner en una bandeja de horno con un chorrito de caldo bañando las pechugas.

Metemos en el horno durante 15-20 min y cuando veas que el pollo esté hecho y el queso derritiéndose, listo. Añade un chorrito de aceite de oliva virgen, albahaca e incluso un poquito de vinagre de Modena al servir.

Vaciamos los champiñones y separamos el relleno del resto del champiñón, cortamos muy bien el relleno en daditos pequeños. Cortamos cebolla y doramos todo en la sartén con una pizca de aceite y sal.

Cocinamos los champiñones enteros previamente salpimentados en un plato para microondas durante 3min, también se pueden hacer en Lekue.

Tener el jamón preparado en trocitos pequeños y precalentar el horno a 180º

Batimos el huevo con un chorrito de leche y una pizca de sal, añadimos a la mezcla la cebolla, el jamón y el interior del champiñón troceado y rellenamos los champiñones una vez cocinados en el microondas.

Metemos en el horno durante 10 min y cuando veas el huevo cuajado, listo.

Una receta deliciosa y nutritiva del libro de Isasaweis, Come genial y no hagas dieta nunca más (las recetas con las que perdió 20 kilos, por cierto).

Cuece los huevos, pela las naranjas y córtalas en rodajas, disponiendo todo (con los huevos cocidos y cortados también en rodajas), en una fuente.

Corta la cebolleta en láminas finas y reparte por encima de las naranjas.

Coloca sobre ello las migas de bacalao (en crudo o ligeramente asadas a la parrilla) y distribuye las aceitunas por la fuente.

Por último, aliña todo con un poco de sal, aceite y unas gotas de vinagre.

Prepara un lomo de salmón de los que ya vienen sin espinas, cortado en dados grandes y colocándolo en una fuente en la que añadas un par de cucharadas de salsa de soja y una de miel. Déjalo en la nevera hasta la hora de comer.

En una sartén al fuego sin nada (cuando esté bien caliente), echa los dados de salmón con el marinado y dale vueltas hasta que se dore.

Sirve recién hecho con una ensalada de lechugas variadas, de tomates cherry con pepinillos y cebolletas... Los encurtidos, según la creadora de la receta (Isasaweis), ¡le van genial!

Otra receta deliciosa de Isasaweis que podrás transformar en crema si lo pasas todo, al final, por la batidora.

Limpia los puerros y quédate sólo con la parte blanca, cortándolos en rodajas. Limpia también las pechugas, retirando la grasa con unas tijeras y ponlo en una olla. Añade agua, el laurel, la sal y la pimienta y pon al fuego.

Cuando empiece a hervir, retira la espuma, tapa y cocina a fuego bajo durante 20 minutos. Aparta después del fuego y deja reposar 5 minutos.

Saca las pechugas y córtalas en dados. Cuela el caldo y devuelvelo a la olla, reservando un vaso a parte.

Pon el vaso de caldo en la jarra de la batidora con la mitad del maíz y tritura. Vierte todo en la olla y lleva a fuego hasta que vuelva a hervir.

Añade después los puerros al caldo, tapa y cocina a fuego bajo unos 8 minutos.

Añade los dados de pollo, el resto del maíz y deja cocer 5 minutos más.

Una opción más de sopa deliciosa para esos días de deshidratación.

Cuece los huevos, pélalos y pícalos. Reserva.

En una olla al fuego pon todo el caldo y espera a que empiece a hervir. Añade el arroz y deja cocer unos 12 minutos.

Añade después los tacos de jamón y deja cocer 3 minutos más.

Prueba y rectifica de sal si es necesario. Sirve la sopa colocando el huevo picado por encima y espolvoreando perejil.

Esta receta, del libro de Isasa, queda deliciosa también si le añades calabacín rallado bien escurrido.

En una sartén, con un poco de aceite de oliva, pocha media cebolla picada con un poco de sal.

Añade la zanahoria rallada, un poco más de sal y remueve unos minutos hasta que se ablande.

Bate los huevos con un poco de sal.

Añade la cebolla y la zanahoria a los huevos batidos y pon todo en una sartén a fuego medio hasta que cuaje.

Dale la vuelta para hacerla por el otro lado.

Agua. Deja volar tu imaginación y prepara distintas aguas con sabores, fresas, kiwis o naranjas…

Mojito KO con refresco zero de limón, hielo picado, hierbabuena, zumo de limón y edulcorante al gusto.

Bebida KO de jengibre con hierbabuena, limón, agua con gas y mucho Jengibre; súper saludable y fresquita.

Bebida de fresas con Sprite Zero, casera, fresas cortadas en láminas muy finitas y hierbabuena. Dejar macerar unas horas y servir con mucho hielo.